-->

martes, 20 de julio de 2010

Y vivir...

Y vivir, y pensar que cada día es único. Porque es así. Porque cada respiro es un detalle que me da la vida. Y por cada día que despierto en la misma cama, bajo el mismo techo, y junto a quienes más quiero, aunque estén en la distancia, debo sentirme afortunada. Y lo estoy. Soy afortunada por pasar esta vida junto a ti. Junto a ellos y a ellas. Porque cada paso que doy es principal en mi destino. Por eso a veces tropiezo, me resbalo, me caigo o simplemente pierdo el equilibrio… Y cuando lo hago me cuesta recuperarme de esa caída, de ese chichón... ¡Pero lo hago! Y sé que algún día podré hacerlo sola. Pero por ahora no quiero. Por ahora mi camino está libre de piedras, hierbajos, vaivenes o curvas. Es un largo camino recto. Un largo camino rodeado de emociones, recuerdos, pensamientos, momentos vividos por los cuales quiero pasar a tu lado. Quiero mirar en la misma dirección. Quiero correr bajo la lluvia débil que pronto hará pequeños charcos. Quiero saltarlos contigo. Quiero empaparme los pies, empaparte a ti y que luego nos riamos juntos. Quiero andar por ese camino llamado Felicidad sin la necesidad de mirar atrás. Y ya lo hago. Estoy andando y tú sostienes mi mano. Me estás regalando esa sonrisa, esa mirada… Me acabas de besar la mejilla… Sí, eres tú. Sí, es mi felicidad.

No hay comentarios: